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Agencias.
El piloto tapatío suma por primera vez desde el Gran Premio de España y se muestra satisfecho por el desempeño de su monoplaza.
McLaren necesitaba sacar agua del pozo a como diera lugar. Los puntos se escapaban carrera a carrera mientras Force India y Toro Rosso tomaban el hueco dejado por los de Woking en los más recientes primeros 10 lugares.
La estrategia en el circuito de Nürburgring era arriesgada, sobre todo tras la incertidumbre que generaban los compuestos de Pirelli, pero que al final terminaron portándose “bien” en la carrera. Así, McLaren apostó a dos paradas en ''pits'' para Jenson Button y Sergio Pérez.
Más que una mejora técnica en el MP4-28, se vio en este Gran Premio una buena estrategia, la cual redituó para ambos pilotos terminar en zona de puntos. McLaren no sumaba unidades desde el GP de Mónaco, con el sexto lugar de Button, mientras que Checo no lo hacía desde el GP de España, cuando terminó noveno. También en España fue la última vez que ambos MP4-28 cruzaron la meta dentro de la zona puntuable.
La gestión de neumáticos de Jenson Button lo tuvieron dentro del top-5 gran parte de la carrera. Por su parte, Sergio Pérez rompió su maldición y dio un gran salto para pasar del lugar 13 al octavo, pero que al final quedó con una sensación de que pudo haber sido mejor el resultado.
Checo largó con gomas suaves, que renovó en la vuelta siete, para montar compuesto medio. Luego vino su segunda y última detención en la vuelta 24, para repetir el compuesto medio, que le duraría hasta el final. Fueron 36 vueltas de duración para la gama más dura del día (Pirelli seguramente ya tomó nota), en otra muestra de la excelente gestión del tapatío.
“El coche rindió mucho mejor que el sábado (clasificación). Tuvimos un mejor ritmo y degradación de lo que esperábamos. Gestionamos un final muy largo y creo que maximizamos todo lo que teníamos. Deberíamos estar contentos”, explicó el piloto tapatío de McLaren.
Para Esteban Gutiérrez, de Sauber, los cambios del material de construcción en las llantas traseras parece que han sido en beneficio del equipo suizo. El regiomontano se mostró bien plantado en Nürburgring, tanto, que mantuvo a raya a Mark Webber, cuando venía rebasando a toda la parte baja de la parrilla en su afán por recuperar lugares, tras el incidente en pits.
Gutiérrez optó por una estrategia de tres paradas en pits, largando con llantas suaves y luego cambiándolas en la vuelta seis por compuesto medio, y repitiendo la dosis en el giro 23. Para cerrar en la 41, con un tercer set consecutivo de la misma goma media.
El regiomontano terminó en el lugar 14, detrás de Adrian Sutil (Force India) y delante de Pastor Maldonado (Williams), equipo que celebró sus 600 Grandes Premios.
“La estrategia no fue ideal, aunque todo fue como lo planeamos, pero el parar antes del coche de seguridad no lo hizo más fácil”, lamentó Gutiérrez.
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